Si tienes curiosidad por saber cómo hacer yemas curadas de huevo, estas en el sitio perfecto. Las yemas de huevo curadas, son yemas de huevos tratadas con sal y azúcar, que se utilizan para conseguir un aderezo que puedes utilizar en muchísimas preparaciones.
Cómo hacer las yemas curadas de huevo
Para hacer las yemas de huevo curadas, no necesitas cocinarlas, es un proceso muy simple con el que transformamos la yema de huevo en un producto cargado de sabor. Es un modo divertido de preservar las yemas y una manera sabrosa de terminar platos con un sabor extra.
Un poco de historia
Aunque lleva poco tiempo popularizándose su uso, la preservación de los huevos en arcilla, barro o salmuera salada es una tradición china centenaria.
Evidentemente, curar los alimentos con sal no es nada nuevo, es una forma muy tradicional de preservarlos. Así es como se tratan productos como el tocino, el jamón, y las salchichas.
Y el responsable de conseguirlo, es la misma bacteria que es responsable del chucrut, el salami y el yogur.
Porqué se curan las yemas de huevo con sal
El responsable de la conservación de los alimentos de esta forma es el lactobacillus.
La sal elimina la humedad y mata las bacterias que hacen que los alimentos se estropeen, y el azúcar alimenta a las bacterias que necesitamos. Es decir, la sal permite que los cultivos que queremos dominen el proceso, al ralentizar el crecimiento de los otros tipos de bacterias. Esto da tiempo a que el azúcar ayude a que el lactobacillus pueda adelantarse y libere ácido láctico que es lo que realmente conserva la comida.
Con esta técnica de cocina conseguimos yemas de huevo probióticas perfectamente conservadas para su degustación.
Beneficios del uso de las yemas de huevo curadas
Además del sabor, obtendrás muchos nutrientes, ya que las yemas de huevo son ricas en: grasas saturadas saludables, fosfolípidos, antioxidantes como carotenoides y fosvitína,
Vitaminas A, D, E, B1, B2, Riboflavina, B6, B9, Folato, B12, Calcio, Hierro, Fósforo y Selenio.
Encontré algunas recetas que tenían principalmente azúcar, con un poco de sal; algunos con en su mayoría sal, con un poco de azúcar; algunos con sales saborizadas. La que más me ha gustado es la que voy a presentaros ahora

Técnica de cocina para curado rápido de yemas de huevo
Equipo recomendado
Ingredientes
- 150 gr Azúcar
- 230 g. Sal
Elaboración paso a paso
- Mezclamos la sal con el azúcar en un bol.
- Ponemos la mitad de la mezcla en la terrina o táper de porcelana o de cristal con tapadera y creamos huecos usando una cáscara de huevo o una cuchara.
- Separa las claras de las yemas con mucho cuidado. Guardamos las claras para utilizarlas en cualquier otra preparación. Por ejemplo, unas milhojas.
- Pon una yema dentro de cada hueco.
- Las cubrimos totalmente con la mezcla de azúcar y sal, que nos quedaba, y las dejamos a temperatura ambiente durante 1 hora.
- Las cogemos profundizando y sin rozar las yemas, no importa que carguemos la cuchara con mucha cantidad de sal y azúcar (no os preocupéis, luego se disuelve en el agua). Y las depositamos con cuidado en un bol con agua fría.
- Ya tenemos nuestras yemas de huevo de curado rápido.
Datos nutricionales
Cómo utilizar yemas curadas
La forma de utilizarlas dependerá del tiempo que las tenemos dentro de la sal.
Curado rápido
Si queremos que la yema no esté totalmente dura, por ejemplo, para utilizarlas con un tartar, o en una sopa, sobre tostadas con mantequilla, para utilizarlas con pasta. Las dejaremos por un breve espacio de tiempo.
Yemas curadas
Si las vamos a utilizar rallándolas; como cobertura para el arroz, sobre una ensalada, sobre pasta, en tostas con aguacate… entonces debes tenerlas curándose más tiempo. Metemos la terrina con la mezcla en la nevera y las dejamos dos días. A partir de ese momento, ya estarán duras y se podrán rallar sin ningún problema.
Curado lento
Si queremos conseguir un sabor concentrado más intenso, muy parecido al queso debemos dejarlas durante una semana. Las sacamos de la mezcla y las guardamos en un táper. Se pueden conservar en frigorífico hasta un mes.
Las podemos utilizar como condimento en ensaladas frescas. Y mezcladas con tomates frescos y servido con arroz, una manera fácil de preparar un plato simple.
¡El resultado es delicioso! Del mismo modo que rallarías el queso parmesano sobre un plato, ralla estas yemas de sal curadas sobre carne, pasta, ensalada o verduras para disfrutar de una guarnición sabrosa y rica. También es una forma estupenda de aprovechar las yemas que nos sobran cuándo hacemos merengues.
Excelente 😃😃😃💖
Excelente explicación, muy agradecido por la recta. Felicitaciones.