Escalivada de dieta y técnica para asar y pelar pimientos

Después de Navidad he estado un mes a dieta para recuperarme de los excesos de esos días.

Me encanta disfrutar en la mesa, que la comida sea variada y estoy convencida que no tengo que renunciar a esto para bajar de peso. Comer de una forma equilibrada y sana no tiene porque ser aburrido ni insípido, hay muchas recetas sabrosas y bajas en calorías. 
De todos los platos que me indico el nutricionista, éste es uno de los que más me gustan. 
Anímate y prueba, creo que es muy bueno porque está basado en la dieta mediterránea; aceite de oliva, verduras, hortalizas y atún, es bajo en grasas y calorías, rico en vitaminas y minerales, vamos que no puede ser más completo.
 Además tiene la ventaja de que puedes asar los pimientos y guardarlos en la nevera durante al menos una semana y así los utilizas para otras recetas.
Para terminar esta introducción, os dejo este pensamiento, porque me parece, que a pesar de los pesares, tenemos que tenerlo siempre presente: 
«Nacemos para ser reales, no perfectos».
¿Qué necesitamos? (2 raciones)
250 gr. de pimientos rojos asados y escurridos
2 latas de atún
1 cebolla pequeña
sal
vinagre (lo puedes hacer con vinagre de manzana, o sustituirlo por limón)
2 cucharadas de aceite de oliva
¿Cómo lo hacemos?
Vamos a empezar con los pimientos.
Los pimientos los puedes comprar ya asados, hay infinidad de marcas algunas de muy buena calidad, pero evidentemente si los preparamos nosotros tienen mejor sabor y por supuesto ningún conservante. 
Además solo por el hecho de hacerlos nosotros seguro que nos saben más ricos. 
Para que no nos resulte tan pesado asar pimientos, te voy a contar como los hago, a mi me resulta sencillo.
Antes de empezar tenemos que saber que de un kilo de pimientos crudos después de asarlos y limpiarlos nos van a quedar aproximadamente unos 400 gr. (depende de la calidad del pimiento)
Lavamos los pimientos con agua fría y los secamos.
Los ponemos sobre la fuente que vamos a llevar al horno.
Los regamos con un poco de aceite de oliva y añadimos un poco de sal al gusto, por encima.

Los metemos en el horno precalentado a 180º, durante 30 o 40 minutos, a mitad de cocción les damos la vuelta.

Una vez que los sacamos del horno, tengo un truco para pelarlos con facilidad.

Es muy sencillo, consiste en taparlos para que el vapor se quede dentro, lo que ayuda a que la piel del pimiento se despegue después con mucha facilidad.
Si tu bandeja no tiene tapa, la puedes forrar con papel aluminio.
Hay que dejarla tapada como mínimo media hora y no más de una hora.

Pasado este tiempo, los pelamos.Ya veréis con que facilidad sale la piel.

Una vez pelados los abrimos por la mitad y quitamos las semillas. Después los cortamos en tiras a nuestro gusto.

Separamos la cantidad que vamos a necesitar para nuestra receta y el resto con su jugo, lo metemos en un tarro de cristal con tapadera, en la nevera. Nos aguanta sin problemas una semana mínimo.
También podemos, una vez cerrados, ponerlos al baño María y ya nos duran meses.

Empezamos con nuestra receta, no puede ser más sencilla.
Con ayuda de una mandolina cortamos la cebolla en rodajas finas.

Ponemos en el plato los pimientos asados, la cebolla cortada en rodajas, el atún. y lo aliñamos a nuestro con la sal, el aceite y el vinagre. Y listo para disfrutarlo.

Colaboración de mi hijo
Me ha ayudado a pelar los pimientos y se ha encargado de las fotografías.

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