El solomillo de cerdo es una carne delicada, tierna y sabrosa. Cocida en el horno conserva su suavidad y ternura. Se prepara rápida, fácilmente y será una delicia para tu paladar.
En una sartén o en la plancha caliente, ponemos la pieza, que previamente hemos embadurnado con aceite de oliva.
La tenemos durante unos de 5 a 7 minutos (dependiendo del grosor de la pieza, en mi caso han sido 5 minutos) por cada uno de sus cuatro lados.
A continuación, añadimos sal, pimienta, romero y tomillo.
Colocamos el solomillo en una bandeja apta para horno y añadimos un par de trocitos de mantequilla sobre la carne.
Lo llevamos al horno previamente calentado a 140º.
Lo tenemos durante 16-20 minutos (dependiendo del horno), dándole la vuelta a la mitad de la cocción.
Mientras se hace el solomillo, ponemos una sartén a fuego medio bajo con aceite de oliva.
Cuando está caliente, añadimos los ajos fileteados y dejamos que se confiten en el aceite a fuego bajo.
A mitad de cocción de los ajos añadimos el brandy, a los ajos. Flambeamos y lo dejamos a fuego bajo hasta que se evapore.
Sacamos el solomillo del horno y lo fileteamos.
Recogemos la salsita que ha soltado el solomillo y la añadimos a la sartén con los ajos.
Añadimos la salsa con los ajos por encima del solomillo y espolvoreamos sal en escamas.
Notas
Horneado: Lo he ordenado durante 16 minutos, queda a nuestro gusto, pero si te gusta más hecho déjalo hasta 20 minutos.En mesa lo sirvo con un cuenco con la salsa caliente para que cada uno la añada a su gusto.